domingo, 22 de noviembre de 2015

La Casa de la Villa de Madrid.



 La Casa de la Villa de Madrid, se construyó en el siglo XVII.

 En el año 1644, según los planos de Juan Gómez de Mora, se iniciaron las obras del edificio. Tras la muerte de éste, fue José de Villarreal quien continuó la edificación realizando modificaciones del modelo original.

 Durante siglos, fue la sede del Ayuntamiento de Madrid.

 Se encuentra ubicada en la singular Plaza de la Villa que, junto con la Torre y Casas de los Lujanes y la Casa de Cisneros, forman el conjunto arquitectónico más bello de Madrid.

    


         Plaza de la Villa de Madrid

 Con anterioridad se llamó Plaza de San Salvador, debido a su cercanía con la iglesia del mismo nombre.

  Precisamente en este citado templo es donde tenían las reuniones los primeros concejos de la villa de Madrid.

 En el plano de Texeira de Madrid de 1656, vemos esta iglesia marcada con la letra B.

  


 La iglesia de San Salvador en el plano de Texeira

 La iglesia de San Salvador quedó pequeña para atender las funciones de Ayuntamiento; por esto en la época de Felipe IV se ordenó edificar el nuevo edificio que se llamaría Casa de la Villa.


   


                  Casa de la Villa de Madrid

  El estilo del edificio formaría parte del llamado Barroco Madrileño.

  Cuando se construyó, dos sedes ocuparon sus dependencias: por un lado el Ayuntamiento y por otro la Cárcel de la Villa.

 La fachada lateral del edificio que podemos contemplar desde la calle Mayor, ha experimentado importantes transformaciones desde la creación del mismo.

   

      Fachada lateral de La Casa de la Villa


  Varios escudos de la dinastía de los Austrias, adornan las diferentes fachadas de este bello edificio, situado en uno de los enclaves más históricos de Madrid.

     


     Escudos de la dinastía de los Austrias en La Casa de la Villa

  Desde hace unos años la sede del Ayuntamiento de Madrid, se trasladó al Palacio de Telecomunicaciones en la Plaza de Cibeles.


    Texto y fotografías: Teresa Miralles Amorós
   

    Bibliografía:

   - Gea, Mª Isabel. Guía del plano de Texeira (1656). Ediciones La Librería. Madrid, 2006

   - Miralles Amorós, Teresa. Paseando por Mayrit. Ediciones Letra Clara. Madrid, 2014.

miércoles, 4 de noviembre de 2015

La muralla árabe de Madrid.



 El emir de Córdoba Muhammad I fundó Madrid en el lugar que hoy ocupa el Palacio Real, hacia mediados del siglo IX.

 El nombre que eligieron los musulmanes para la nueva ciudad fue Mayrit. Así llamaron en principio al arroyo próximo que discurría por un abrupto barranco. Este arroyo hoy es la calle Segovia. 

 La riqueza y abundancia de aguas que transcurrían por estos parajes, junto a la posición elevada de la colina sobre la que se asienta hoy el Palacio Real, les favorecía estratégicamente para la defensa de posibles ataques de sus enemigos.

 Estos debieron ser los principales motivos para decidir fundar en este lugar su ciudad, con su castillo, mezquita, muralla y zoco.

 De la presencia musulmana en Madrid, han podido conservarse, a través de los tiempos, restos que nos muestran la importante historia que siempre deberíamos recordar.

 La ciudad que formaron era muy pequeña. Estaba protegida por la muralla, cuyo principal material de construcción era el pedernal.

 Fue declarado monumento histórico en enero de 1954.

 Esta muralla tenía tres puertas principales: Puerta de la Vega, Puerta de Santa María (para algunos historiadores Arco de la Almudena) y Puerta de la Sagra, como también contaba con pequeños portillos que, permitían una mayor rapidez para las entradas y salidas de los habitantes de la ciudadela.

   



     Fotografía que se encuentra en la Cuesta de la Vega, donde se aprecia el trazado de la muralla árabe

 El tramo de la misma más importante que permanece, es un lienzo que podemos admirar en la llamada Cuesta de la Vega.

 En proceso de restauración, este es el aspecto que ofrecía antes de la reforma.


         Muralla árabe de Madrid


 En estos momentos, con la obra casi finalizada, es grato contemplar su nueva imagen.


          Muralla árabe de Madrid

  Espacio evocador donde hacemos volar nuestra imaginación, y pensar en la vida cotidiana tras esta muralla de la población musulmana.

 Es emotivo saber que tras este muro, estuvo trabajando el gran matemático y astrólogo Maslama al-Mayriti.

 El trazado de la muralla desde la Cuesta de la Vega avanzaba hasta la calle Mayor; antes de llegar, en la planta baja de un inmueble de la calle Bailén, la historia ha querido mostrarnos otro pequeño tramo del muro.


          Muralla árabe de Madrid

  Desde este lugar, atravesando los Altos del Rebeque y la calle Factor, proseguía su recorrido hasta la actual Plaza de la Armería donde, en el solar en el que han construído el Museo de las Colecciones Reales, se hallaron restos importantes de la muralla.

 Este museo todavía no está abierto al público y no podemos observar los tramos que se han conservado.

 Desde aquí la muralla cerraba su perímetro en la mencionada Cuesta de la Vega.

 Durante la última remodelación de la plaza de Oriente a finales del siglo pasado, se halló la Torre de los Huesos, atalaya islámica del siglo XI, la cual estaba fuera del recinto amurallado y se puede contemplar en el aparcamiento subterráneo que construyeron en la plaza.

      
         Atalaya islámica del siglo XI

  En otras zonas de Madrid, hay restos de una hipotética segunda muralla musulmana y un viaje de agua en la plaza de los Carros.

 Hay constancia de arrabales islámicos y gracias a los silos, se han encontrado muchos utensilios de cerámica que han permitido conocer mejor la vida cotidiana de los habitantes de Mayrit.

  Desde la Cuesta de la Vega se pueden admirar bellos atardeceres. En este lugar los musulmanes fundaron su ciudad, Mayrit.




                 Atardecer desde la Cuesta de la Vega


              


  Texto:
  Teresa Miralles Amorós.

  Fotografías:
  Teresa Miralles Amorós.

  Bibliografía:

  Gil-Benumeya, Daniel. Madrid islámico. Ediciones La Librería. Madrid, 2015.

  Miralles Amorós, Teresa. Paseando por Mayrit.

Ediciones Letra Clara. Madrid, 2014.

lunes, 12 de octubre de 2015

La Plaza de los Carros y la Plaza Puerta de Moros de Madrid



 La Plaza de los Carros y la Plaza Puerta de Moros, están geográficamente unidas en pleno barrio de La Latina de Madrid. Quizá sean dos de las plazas de la ciudad que han sido testigos de la mayoría de los episodios de su historia.
  
 En este singular enclave, los musulmanes formaron sus primeros arrabales, siendo los mozárabes los que poblaron en principio estas tierras.


 A finales del siglo pasado se realizó una importante remodelación de la Plaza de los Carros. Entre restos de cerámicas y diversos utensilios, se halló un importante viaje de agua, construcciones hidráulicas con las que los musulmanes, sabiamente, supieron canalizar los numerosos arroyos que transcurrían por esta zona.






    La Plaza de los Carros
    Fotografía de Teresa Miralles Amorós


 La muralla cristiana tenía parte de su recorrido por estos terrenos.
 En uno de los establecimientos de la Plaza de los Carros, podemos contemplar todavía un tramo evocador de dicha muralla y del pasado histórico de Madrid.


              
             Muralla cristiana de Madrid
             Fotografía de Teresa Miralles Amorós


 Junto a la Plaza de los Carros encontramos la llamada Puerta de Moros, que así se denominaba una de las puertas de la muralla cristiana.
 Su nombre tuvo relación con los habitantes que residían en estos arrabales islámicos.





        Fotografía de Teresa Miralles Amorós


 Años más tarde en este lugar se levantó la primitiva iglesia de San Andrés, que debió ser mozárabe y se cita en el Fuero de Madrid de 1202.
 San Isidro estuvo enterrado en este templo.

  Posteriormente la iglesia se reformó en el siglo XVI y, adosada a esta en el siglo XVII se construyó la Capilla de San Isidro, que preside majestuosamente la zona donde se albergan estas dos bellas plazas de Madrid.

  


          Capilla de San Isidro
          Fotografía de Teresa Miralles Amorós



          Teresa Miralles Amorós.

  
          Bibliografía:

         Miralles Amorós, Teresa. Paseando por Mayrit. Editorial Letra Clara. Madrid, 2014

  

domingo, 20 de septiembre de 2015

Las casas y torre de los Lujanes.



 Las casas y torre de los Lujanes, se construyeron en el siglo XV en Madrid y, desde entonces, forman el edificio civil más antiguo de la ciudad.
 La construcción de la torre es anterior a la de las casas. Junto a la Casa de Cisneros y la Casa de la Villa, componen la bella Plaza de la Villa de Madrid.


Fotografía de Teresa Miralles Amorós

 La antigüedad de la plaza es tal, que se hallaron en este lugar restos de un zoco musulmán.
 Igualmente, fue una de la principales plazas medievales, llamándose por entonces plazuela de San Salvador.
 La torre de los Lujanes es evocadora del pasado histórico de la ciudad. Su puerta con arco de herradura, nos manifiesta una clara influencia musulmana.



       Fotografía de Teresa Miralles Amorós

  Por último, quiero ofrecer una composición fotográfica que realicé de la singular Torre de los Lujanes de Madrid.


                                                                                                             Fotografía de Teresa Miralles Amorós

Teresa Miralles Amorós

Bibliografía:

  Teresa Miralles Amorós."Paseando por Mayrit". Editorial Letra  Clara. Madrid, 2014.




                                




lunes, 29 de junio de 2015

  La Casa del Tesoro

 La Casa del Tesoro fue una edificación que mandó construir Felipe II en el siglo XVI.
 Anexa al Alcázar de los Austrias, la principal finalidad de la misma, consistió en proporcionar vivienda a todos aquellos que trabajaban en Palacio y, entre ellos, ilustres personajes como Diego de Velázquez.
 Bonaparte, en 1810, ordenó derribarla para crear la Plaza de Oriente.
 Cuando se acometieron las obras de la última reforma de esta plaza, aparecieron vestigios y restos arquelógicos de dicha Casa.
 De la edificación surgieron principalmente los sótanos y, creía que solo se habían conservado objetos decorativos y de uso diario, los cuales, se pueden contemplar en el Museo de los Orígenes de Madrid y en el Museo Arquelógico Regional de Alcalá de Henares.
 Pero no. Al parecer, elementos arquitectónicos de esta singular casa también se conservaron, como se afirmó en un artículo del periódico "El País", publicado el domingo 9 de Febrero de 2003.
 Han pasado casi veinte años de la reforma de la Plaza de Oriente, y, que yo sepa, estos elementos arquitectónicos, evocadores de culturas y siglos pasados, ni los han ubicado en ningún lugar, ni se han expuesto jamás al público.

 En la siguiente fotografía que realicé del plano de Madrid de Texeira, que hizo en 1656, vemos el Alcázar de los Austrias y, a su lado, La Casa del Tesoro.




   Teresa Miralles Amorós.
  
   Bibliografía:

 - "Paseando por Mayrit".
  Teresa Miralles Amorós.
  Editorial Letra Clara. Madrid, 2014




domingo, 22 de marzo de 2015

Cervantes y Velázquez.

  Miguel de Cervantes nació en Alcalá de Henares en 1547. Falleció en Madrid en 1616.
  Parece que supuestamente han aparecido sus restos en la iglesia de las Trinitarias, donde fue enterrado.
  No tuvo la misma suerte el pintor Diego Velázquez. Nacido en Sevilla en 1599, murió en Madrid en 1660.
  Fue enterrado en la iglesia de San Juan construida en el siglo XII.
  Bonaparte durante su invasión ordenó el derribo de esta iglesia, por lo que puede que los restos del pintor ya se perdiesen.
  El espacio que se originó tras la desaparición del templo citado, es lo que conocemos hoy como la plaza de Ramales.
  No hace muchos años, se decidió construir un aparcamiento subterráneo en este lugar.
  Los responsables de este proyecto afirmaron no encontrar resto alguno de Velázquez, por lo cual la obra siguió su curso.
  Permanece en esta plaza un monumento que recuerda que allí estuvo enterrado el genial pintor, así como restos de la iglesia de San Juan. 
  Esta misma mañana, he podido fotografiar la plaza de Ramales.



sábado, 7 de febrero de 2015

El huerto de las monjas

  En 1616, Don Cristóbal de Sandoval y Rojas, duque de Uceda, fundó el Convento del Santísimo Sacramento en Madrid. Las monjas que lo habitaban eran Bernardas.
  Las obras del mismo se suspendieron. Se retomaron en 1671 y la nueva iglesia se construyó en 1744.
  Después de la Guerra Civil, el convento  tuvo que ser reconstruido, para finalmente desaparecer en 1972.
  Pero han subsistido la iglesia y el huerto del mismo. Este último convertido en un precioso jardín, al que se puede acceder desde la calle del Rollo o desde la calle del Sacramento. Un rincón tranquilo y lleno de paz en pleno barrio de los Austrias de Madrid. Así se le conoce: " El huerto de las monjas".




Fotografía realizada por Teresa Miralles Amorós.

Bibliografía:

 "Guía del Plano de Texeira  (1656)"
  Mª Isabel Gea.
  Ediciones La Librería, 2006